viernes, 2 de diciembre de 2011

Capítulo 10-¿Quiénes somos?

Tania se fue con Berta, pero esta ya se había calmado y le dijo:
-Creo que me he pasado. Estamos muy nerviosos, y no debemos tomar en serio todo lo que digamos. Deberíamos permanecer juntos. ¿Qué te parece si volvemos?
-Si, está bien.
Dieron media vuelta y se dirigieron  hacia los demás, pero Berta paró en seco al escuchar la voz de Stephan.
-Shh-le indicó a Tania.
-Deberíamos seguir sin ellas. Lo único que hacen es molestar, y no nos dejan avanzar.-y esa fue la gota que colmó el vaso.
-¿Pues sabes qué?- le dijo a Tania enfadada- Yo prefiero seguir sola que con alguien que no me respeta.
-Nosotras tampoco les necesitamos- añadió Tania.
Las dos se dieron la vuelta y, sin mirar atrás, se marcharon de aquel agujero, dejando a sus compañeros.  

*

Mientras tanto, Víctor ya se había presentado a Laura y Andrea, y se habían puesto a conversar a la orilla del río. Más tarde, decidieron dar un paseo y buscar algo de comer.
-¿Pero cómo has hecho eso? Lo de respirar bajo el agua, me refiero- preguntó Laura.
-Si no estaba respirando. Simplemente he aguantado la respiración.
-¿¡Cinco minutos!?-  pregunta Andrea, con incredibilidad.
De repente, de entre los árboles, apareció una especie de sombra que desconcertó a los chicos por un momento, pero pronto tomó la forma de un adolescente.
Iba vestido de negro de pies a cabeza, y con un movimiento rápido cogió a Laura de rehén.
-¡Eh! ¿¡Qué haces!?- exclamó Víctor, bastante asustado.
-¡Cállate! -le apuntó con una espada- Ni un paso más.
 Pero al fijar sus ojos sobre Andrea, la cara le cambió inmediatamente.
-¡Tú!- exclamó él.

*
Tania y Berta habían caminado durante unos veinte minutos, hasta que oyeron unas voces a lo lejos.
-¿Qué es eso?- preguntó Tania.
-Shh. Vamos - le dijo Berta
Se acercaron sigilosamente y observaron la escena detrás de unos arbustos.
-¡Eh! Esa es Laura- susurró Berta sorprendida al verla en peligro.
-¿Quién?- preguntó Tania
-¡Pues Laura!- le dijo señalándola, haciéndolo obvio.
-¿¡Quién!?- repitió Tania con voz más elevada.
-¡Laura, Laura!- dijo Berta, cada vez más alto.
-¿¡QUIÉN!?- gritó Tania, ya desesperada.
El chico que sujetaba a Laura se dio la vuelta al escuchar el grito, y esta aprovechó esa oportunidad para escapar.
-¡Corred!- gritó Laura a sus compañeros.
Tania quiso llamarlos pero antes de hacerlo, miró en dirección a Berta, que ya no estaba ahí.
-¿Berta?- susurró
-¿Qué pasa?- se oyó a su lado
Tania dio un pequeño salto hacia atrás.
-Berta, ¿dónde estás?
-¡A tu lado! ¿No me ves?
Tania empezó a dar manotazos al aire, hasta que chocó con algo.
-¿Pero de que vas?- le dijo Berta
Y en ese momento los arbustos tras los que estaban escondidas se abrieron, y apareció el chico de negro que miró a Tania despectivamente. En un intento de cogerla, Tania, asustada, gritó con todas sus fuerzas y el chico salió volando por los aires.
-¡Ah! Mis oídos- dijo Berta
-Lo siento, me he asustado. ¿¡Quién era ese!?- exclamó Tania- ¿Pero dónde estás?
No hizo falta seguir preguntando, ya que Berta fue retomando el color. Se había vuelto verde por el susto, lo que la camuflaba entre los arbustos.
Tania se quedó perpleja ante este cambio.
-¿Cómo has hecho eso?
-¿El qué? ¿Pero qué ha pasado?
-No se te veía- le dijo Tania
-Tendrá que ver con lo de la mano-dijo Berta, casi para si misma.
-Ah si, que desaparecía y aparecía. ¿Será cómo lo de mi grito?
- Pero…. ¿quiénes somos?- preguntó Berta

*

Laura, Víctor y Andrea estuvieron corriendo hasta que se quedaron sin aliento.
-¿¡Quién era ese individuo!?- gritó asustada Laura
-¿Individuo?- preguntó Víctor
-No sé- susurró Andrea- pero parecía que me conocía.
-¿Y tú le conoces a él?- preguntó Víctor
- ¡He dicho qué no!- se le notaba realmente alterada
-Vale, vale, cálmate mujer- le dijo Laura
-Pero…. ¡Cómo quieres que me calme! ¡Hemos aparecido en este maldito bosque, no conozco nada, ni siquiera se quien soy, ni de donde vengo, ni como he llegado aquí!
 -Tú no eres la única que está confundida, pero poniéndote como una loca no vas a solucionar nada- le dijo Víctor.
-Solo quiero saber… quienes somos.